Reciclar basura es un factor de gran importancia para la conservación del medio ambiente, por lo que separar los residuos en la recolección de basura facilita y aporta una serie de beneficios como el ahorro de energía, evitar la explotación de los recursos naturales, reducción de contaminación y la posibilidad de alargar la vida útil de los vertederos, entre otros.
Sin embargo, un artículo publicado en El Universal, menciona que solo 12% de los mexicanos reciclan todos sus desperdicios plásticos, según el primer informe anual Estado Actual del Reciclaje de Plástico en México elaborado por la empresa de envases, Hi-Cone, con sede en Estados Unidos.
Por lo tanto, es esencial conocer la importancia de cuáles son los tipos de basura, qué pasa con ellos y cómo pueden clasificarse de manera exitosa:
Tipos de Basura
- Basura sólida urbana: Se componen de basura doméstica
- Basura industrial: Puede incluir escombros y materiales similares, en general, no peligrosos para el medio ambiente.
- Basura agraria: Proceden de la agricultura, la ganadería, la pesca, las explotaciones forestales o la industria alimenticia.
- Basura médica: Restos del trabajo clínico o de investigación.
¿Cómo clasificar la basura para que pueda ser reciclada?
Por lo general, existen tres tipos de clasificaciones principales, esto según:
- Composición: Envases, papel y cartón, vidrio
- Biodegradabilidad: Orgánicos e inorgánicos
- Origen: Domiciliarios, industriales, hospitalarios, de construcción
A lo largo del tiempo, se han establecido seleccionar contenedores de colores para identificar el tipo de residuo y así facilitar la recolección de esta, ahorrando una gran cantidad de tiempo y que la basura pueda ser procesada para darle otros usos. Los colores más habituales son:
- Azul: papel y cartón
- Verde: vidrio
- Amarillo: envases y plásticos
- Café o marrón: orgánico
- Gris: otros restos
Cuando los desechos se procesan y se transforman, se puede obtener distintos recursos como materia prima que puede ser utilizada en nuevos procesos de fabricación. Así, el reciclaje contribuye a eliminar los residuos generados, a ahorrar en los procesos industriales y a reducir la explotación de los recursos naturales.